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El vidrio se rompió tras el montaje o al calentar el aparato.
Aunque el vidrio vitrocerámico es muy resistente a las altas temperaturas, sigue siendo un material frágil que puede romperse si es forzado por algún elemento o si ha sufrido un impacto.
Para que podamos comprender mejor el origen de la rotura y evitar que vuelva a ocurrir, rogamos nos indique su nombre y número de pedido mediante el formulario de contacto, adjuntando una fotografía del vidrio en la puerta de su aparato.
Atención: la fotografía debe mostrar el vidrio entero, así como el marco de la puerta (cara interna) y debe ser lo más nítida posible. Sin esto, no podremos tratar su solicitud.
El vidrio se oscurece pese al tratamiento de autolimpieza
En efecto, este tratamiento puede resultar ineficaz en determinados casos: un aparato que funciona a bajo rendimiento (el tratamiento reacciona al calor de la chimenea), un combustible inadecuado (húmedo, resinoso) o incluso una mala circulación del aire en el interior (debido a múltiples causas: suciedad en el conducto o junta desgastada o inadecuada).
Un pequeño truco: si tiene una junta de vidrio en la parte superior, se puede quitar. Esto permitirá que el aire circule a lo largo del vidrio y debería limitar el depósito de hollín.
Asimismo, le aconsejamos aumentar bien la temperatura de la chimenea para que el hollín se desprenda solo.
Si, a pesar de todas estas precauciones, el vidrio sigue oscureciéndose, envíenos su nombre y número de pedido, así como una fotografía del vidrio (cara interna y vidrio entero) a través de nuestro formulario de contacto.