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Morillos y parrillas con o sin cajón

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Para asegurar una buena combustión de la leña y una mejor distribución del calor, es necesario que el aire circule alrededor de toda la leña.

Los morillos consisten en dos barras de fundición que permiten elevar la leña para optimizar así su combustión.

Las parrillas sin cajón actúan como los morillos, pero están formadas por un armazón de fundición completo que mantiene elevados incluso los troncos más pequeños.

Las parrillas permiten asar en el hogar de la chimenea.